En una Sala Caracol casi repleta un grupo con nombre propio, pese a tener únicamente tres discos, hicieron una gran noche de puro hard rock setentero, este grupo es The Answer.
No era la primera vez que este grupo irlandés había pisado la capital, esta vez con motivo de la presentación de su nuevo disco, "Revival"
Desde que fueron teloneros de AC/DC durante la gira "Black ice" The Answer solo ha cosechado buenas críticas y miles de seguidores, durante esa gira más de un millón de personas vieron al grupo telonear a AC/DC.
Se podía ver que este grupo gusta tanto a jóvenes como a menos jóvenes, de todo tipo y condición, creo que debe de ser por ese estilo setentero con un halo de recuerdo a Deep Purple o Led Zeppelin, pues el cantante además recuerda mucho el estilo de Rober Plant. Con guitarra consistente, fuerte presencia de bajo y la aparición de una armónica en algunas canciones, dándole un estilo rockero clásico, pero renovado y joven.
El concierto comenzó a las 21.30, sin teloneros, lo que abarató probablemente el coste de la entrada, 20 € en taquilla. Como siempre el grupo se dejó la piel en el escenario, por parte de Cormac (voz), siempre sintiendo la música con unos bailes casi epilépticos, Paul (guitarra) nos obsequió con un grandísimo solo de guitarra aparte de la continua demostración con la 6 cuerdas, Micky (bajo y coro) se movió por todo el escenario dando constancia de la fuerza del bajo en cada canción y por parte de James (batería) consiguió que toda la Caracol temblara.
Es anecdótico en la canción Preachin de su primer disco Rise, Cormac bajara del escenario y llegase hasta la mitad de la sala, haciendo moverse con mas ganas a todos los presentes, e incluso consiguió que todo el aforo se agachase con él en mitad de la canción para luego levantarse y seguir saltando junto al cantante, inexplicable la cara que puso cuando subió al escenario y miró al tendido con cara de felicidad máxima como diciendo "sois de puta madre"
Para los bises, antes de empezar realizaron un guiño a los presentes con una curiosa versión rockera del archiconocido “oe oe oe”, en conclusión ganas de pasárselo bien no les faltaba. Una vez acabado el concierto, después de unos 15 minutos, bajaron al escenarios y se hicieron fotos con todos los fans, siempre con una sonrisa y emoción. Un detalle que siempre gusta. Por culpa de la fama no han cambiado y se dejan la piel con la gente arriba y abajo del escenario cada minuto.
Como Cormac dijo en su despedida, “ Hasta la próxima” espero que sea pronto.
Rakel y Locken
No hay comentarios:
Publicar un comentario